Fotografía de Placer ConSentido |
Vive desde el amor.
Pero que sea un amor puro, auténtico y genuino.
Vive desde el amor.
Pero no porque lo leas aquí, que sea una decisión consciente.
Y que ese amor no tenga miedo. El amor no duele, lo que duele es el miedo de que no sea correspondido. Pero.. ¿y si no lo esperas?
Amar no significa intercambio, amar significa AMAR.
Las barreras en el amor surgen del miedo. No tengas miedo de que te hagan daño, podrás superarlo y eso te hará todavía más fuerte. Y tú habrás disfrutado de amar hasta el final.
No te niegues la capacidad de amar. No te condenes a vivir a medias.
Siéntelo, exprésalo. Goza del amor incondicional.
Con todas las letras, con todas las fuerzas. Con todo tu cuerpo.
Vive desde el amor.
Y esto no quiere decir que priorices la autoestima de l@s demás a la tuya, que no practiques la asertividad ni que decidas tu vida en función de l@s demás.
Quizás este texto te parece utópico, pero es real.
Yo vivo desde el amor. Siento amor todos los días. Siento amor todo el día.
Amor hacia cada uno de los seres del planeta. Sin tener en cuenta sus actos, teniendo en cuenta en qué nivel de consciencia se encuentran… Y comprendiéndolos.
Y no justifico los actos de maldad, pero los perdono en mi interior y actúo.
¿Sabes? El amor diluye la venganza.
Sé que no puedo hacer que no exista el odio, la crueldad ni el mal en el mundo. Pero puedo hacer que haya más amor a mi alrededor. Puedo dar mi pequeña aportación.
En lugar de quejarme por lo mal que está el mundo, puedo dirigir todos mis esfuerzos en crear más amor a mi alrededor. Y no digo que esto sea lo correcto, esta es tan solo mi elección.
¿Te imaginas qué ocurriría si se invirtiera más tiempo en dar amor?
Cada vez que la mente queda enganchada en la queja, se pierden de vista la cantidad de cosas maravillosas que suceden cada día a nuestro lado.
Y no solo amor hacia todo lo viviente, también amor hacia la profesión. Porque con este amor puedo contribuir a que se tome consciencia de la importancia de invertir en una buena educación.
¿Cuál es, para mí, el cambio en el mundo? Promover una educación llena de valores.
Sé que es una inversión a largo plazo, pero no conozco una inversión más rentable y segura.
Y no, no me ha invadido el espíritu navideño 😉 esta es mi mejor receta para todo el año:
1. Por mucho que vivas desde el amor, es posible que te cruces con personas cuyas acciones pueden dañarte (en muchos niveles). Pero en ti está la decisión de cómo lo quieres vivir.
Siente tu emoción, exprésala y, después, perdona, déjalo ir. Cada vez que perdonas, te liberas. En cambio, no perdonar solo te encadena a ti (en muchas ocasiones, al otro le da lo mismo tu perdón).
Y no esperes que te agradezcan o te devuelvan lo que tú has dado. Recuerda que lo has dado porque así lo has querido. Pero toma las decisiones necesarias también acerca de lo que quieres en tu vida y lo que no.
2. Celebra las alegrías de l@s demás. Yo lo tengo claro: ¿por qué quedarme sólo con mis alegrías si puedo disfrutar también de las de los demás? ¿Será avaricia? 😉
La vida es mucho más bonita con una sonrisa, ¿verdad? Regálasela a las personas de tu alrededor.
3. Abre la mente y aprende de las diferencias que encuentres en otras personas. Tenemos la gran suerte de vivir rodead@s de personas con historias distintas a las nuestras y formas diferentes de ver la vida, ¡qué maravilla poder enriquecernos entre tod@s!
4. Agradece siempre. Cada mañana abro los ojos agradecida por la oportunidad de vivir. Todo lo que viene a mi vida me parece positivo (aunque objetivamente pueda no parecerlo, para mí sí lo es). Porque creo que absolutamente todo me va a aportar algo, y solo yo decido cómo interpretar lo que me sucede.
5. No te hagas responsable del bienestar de los demás, nadie es imprescindible para nadie. Amar también significa ver en el otro su capacidad de superación.
6. Responsabilízate de tus emociones. Nadie te las provoca. Tú y tu forma de interpretar el mundo sois l@s únicos responsables de cómo te sientes. Puedes expresar cómo te sientes, pero siempre desde el yo (“me siento…”, en lugar de “me has hecho sentir…”).
No dejes tu amor propio en manos de nadie ni te creas con el poder de tener en tus manos la autoestima de nadie.
7. Mira a los ojos y sé transparente, deja que tu alma salude al alma de quien tienes delante. No sirve de nada esconderla por miedo a que la lastimen.
Puedes preferir que los demás opinen bien sobre ti, pero no lo necesitas. Al fin y al cabo, cada un@ mira desde su propio filtro. Así que no juzgues por lo que ves a simple vista, mira directamente el alma de la otra persona.
8. Abraza. Abraza siempre que lo sientas y libera el perfume de tu ser en cada abrazo.
9. Suelta todo aquello que tengas miedo de perder.
Tengo la tranquilidad de que quien tenga que estar en mi vida, lo estará. Y quien tenga que irse, se irá. Solo se puede amar libremente, sin posesión.
Esto no significa que no tengas que elaborar un duelo cuando alguien desaparece de tu vida. Recuerda que el dolor es necesario, pero el sufrimiento es opcional.
10. Vívelo todo intensamente, como si fuera la primera vez (y no la última, ya que en la última puede estar el miedo de perderlo y la ansiedad).
Vívelo con esa curiosidad ante lo desconocido. Las relaciones, los placeres, la naturaleza, el sexo… La vida.
Ni cuando hablo de temas sexuales ni cuando lo hago desde la parte más psicológica o espiritual, nunca digo nada que yo no practique o que no haya experimentado primero. Creo que es un ejercicio de honestidad hacia ti.
¿Me permites una última reflexión? Eres todo lo libre que quieras ser, no lo olvides.
Fotografía de Placer ConSentido |
Y, como siempre, ¡feliz sexo!
Me encanta! Muchas gracias 🙂
Gracias por tu comentario, me alegro de que te haya gustado.
Saludos!
Precioso !!! Grandes consejos .
Muchas gracias! Me alegro de que te sirvan. Saludos!!