Hay preservativos con estrías, sensitivos, con doble protección, con espermicidas, con sabores, fluorescentes, retardantes, con efecto cosquilleo… Pero aún así, se continúa utilizando la excusa de “es que me quita sensibilidad” y se rechaza su uso, aún sabiendo las consecuencias que puede conllevar esta desafortunada decisión.
Pero pronto llegará la revolución: La marca Origami ha diseñado unos preservativos que interaccionan durante la relación sexual consiguiendo que protección y placer vayan más de la mano que nunca.
Creado por científicos estadounidenses, este preservativo, llamado Origami por sus creadores Daniel Resnic y Ray Chávez, cuenta con una estructura de pliegues que lo convierten en todo un juguete erótico. Está fabricado con silicona y, al estar interna y externamente lubricado y no quedar totalmente adherido al pene, tal y como hacen los preservativos de látex habituales, permite una mayor fricción. Y por lo tanto, un mayor placer.
Lo puedes ver en este vídeo:
Además, su diseño proporciona una mayor protección contra las infecciones de transmisión sexual y, gracias a su diseño, es muy fácil de poner y no se puede quedar enrollado en el interior de la vagina.
Estará disponible en tres versiones: Para poner en el pene, para el interior de la vagina y para el interior del ano.
Así quedaría el preservativo femenino dentro de la vagina:
Como siempre, cualquier esfuerzo por ayudar en la prevención y en el disfrute, es bienvenido.
Aunque todavía no se sabe cuando saldrá a la venta (ni a qué precio), te avisaré para que no te lo pierdas 😉
Para más información, esta es su página web oficial: http://www.origamicondoms.com/