Hoy te traigo algunos consejos para elegir tu vibrador perfecto. Ese maravilloso objeto de placer que te acompañará en tantos viajes eróticos.
Hace unos meses, pudiste conocer su curioso nacimiento en el post ¿Cuál es la historia de los vibradores?, así que hoy vamos directamente a ver aquellas características que nos interesan en el momento de quedarnos con el nuestro. Y lo vamos a hacer a través de varias preguntas.
¿Lo quieres realístico o de fantasía?
Aunque hace unos años los que más se vendían eran aquellos que parecían auténticas réplicas del pene, hoy en día los diseños de fantasía han pasado a un primerísimo plano. Así que podemos encontrar una gran variedad de modelos.
Si prefieres que se parezca a los genitales masculinos, tu elección iría en esta dirección:
Incluso puedes conseguir réplicas del pene de tus actores favoritos o clonar un pene que ya conoces y convertirlo en tu vibrador o dildo (míralo en ¿Quieres clonar tus/sus genitales?).
Si por el contrario, quieres algo más artístico, tienes un abanico mucho más amplio. Desde simples formas fálicas en distintos colores llamativos, hasta verdaderas obras de arte llenas de originalidad.
Para que te sientas bien y a gusto con él, primero te tiene que entrar por los ojos 😉
Si prefieres que no vibre, tienes preciosos dildos entre los que elegir:
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Algo muy curioso es la cantidad de vibradores y dildos que podemos encontrar con formas de animales (y tienen un gran éxito).
¿Qué tamaño quieres que tenga?
A pesar de que los vibradores de mayor tamaño suelen llamar la atención, los que más se venden son los de 10-16cm (de largo).
Si lo que quieres es hacer una estimulación más externa (y no de penetración vaginal), un vibrador de menos de 10cm y fino te servirá para hacer vibrar el clítoris, los labios vaginales… Y todo tu cuerpo.
En cuanto al grosor, el tamaño estándar está en 3,6 cm. Pero, una vez más, depende de lo que a ti te apetezca.
¿Qué zonas quieres que te estimule?
Tal y como he mencionado en la pregunta anterior, quizás prefieres una estimulación externa, en lugar de la penetración vaginal. En ese caso, tienes los mini estimuladores de clítoris (como los de las dos fotos anteriores) o los famosos masajeadores de clítoris (tan utilizados por la maravillosa Betty Dodson):
Si quieres que tenga doble estimulación (vagina y clítoris):
Triple (vagina, clítoris y ano):
O que te haga vibrar la zona del punto G (si quieres aprender a estimularla, asiste a una de nuestras reuniones, ven al taller “Caminando hacia el placer” del próximo día 29 de noviembre o apúntate al grupo de crecimiento erótico).
Los vibradores que tienen el extremo superior en curva, nos sirven para estimular esta zona.
Para la estimulación simultánea de clítoris y zona del punto G, una buena opción son los que tienen forma de pinza y que se utilizan durante las relaciones sexuales con penetración, como el We-Vibe.
Otra opción es comprar un vibrador liso y complementarlo con un pack de fundas de diferentes texturas.
Estas fundas se pueden poner encima del vibrador, en los dedos o en un pene. Al hacer el movimiento de penetración, sentiremos en la vagina las diferentes sensaciones.
Así que, como ves, todo depende de cuales sean tus puntos preferidos.
¿De qué material quieres que sea?
Esta es, para mí, la elección más importante. Es fundamental que tu juguete esté hecho con un material que respete tu cuerpo y, para ello, una fantástica elección es la silicona (y más si es quirúrgica 100%). La silicona transmite muy bien la intensidad de las vibraciones, se calienta rápidamente, mantiene la temperatura más tiempo que otros materiales y se adapta a la forma del entorno que lo recibe. Eso sí, no hay que utilizarlo junto a lubricantes de silicona, ya que se podría estropear el vibrador (siempre lubricantes de base de agua).
Este último punto también hay que tenerlo en cuenta. Hay quien prefiere un material más blando y que se adapte al cuerpo y hay quien prefiere que sea más duro. Como, por ejemplo, en el caso de los dildos, el Pyrex (que también es una buena opción para nuestra salud).
Los vibradores de plástico son otra opción dura y sólida, pero pueden irritar la piel. Igual que los de látex, que aunque son muy resistentes, pueden provocar irritaciones y son difíciles de limpiar.
Lo que no recomiendo son los vibradores de jelly (gelatina). Aunque es un material muy flexible y fácil de moldear, también es muy poroso, cosa que dificulta su lavado y que nos puede acarrear problemas. Además, en numerosas ocasiones contiene ftalatos. El hecho de que la Unión Europea 2005/84/EC prohíba su uso en los juguetes para niños, nos tendría que hacer reflexionar acerca de su uso en la industria erótica. Lamentablemente, es de los materiales que más se venden y se recomiendan en los sexshops, debido a la gran variedad de vibradores fabricados con él y a su bajo coste.
En cualquier caso, si quieres comprarte un vibrador de Jelly, te recomiendo que te asegures de que está libre de ftalatos.
En cualquier caso, si quieres comprarte un vibrador de Jelly, te recomiendo que te asegures de que está libre de ftalatos.
¿Cuál es tu color favorito?
Esto es una simple cuestión de gusto estético. Los colores que más se utilizan en vibradores son el rosa, el lila, el blanco y el negro, pero podemos encontrarlos en una gran variedad de tonalidades. Incluso los hay que brillan en la oscuridad.
¿Cuánto te quieres gastar?
Dependiendo de las prestaciones que quieras que tenga y de la calidad de los materiales (y de la marca), puedes encontrar vibradores por menos de 5€ o por más de 4 cifras. El precio de los vibradores más vendidos lo podríamos situar en los 40€.
En el pie de cada foto puedes ver nuestros precios (el PVP entre paréntesis es el precio habitual de venta en tiendas).
¿Cuál quieres que sea su sistema de alimentación?
Esta elección hará variar el precio de compra inicial, pero también te puede ayudar a ahorrar en el futuro. Así que, aunque los vibradores de pilas suelen ser más económicos, los que llevan cargador evitan tener que estar comprando pilas frecuentemente (y eso que le ahorramos también al medio ambiente).
Otras características:
– Intensidad de la vibración: Normalmente, tienen dos botones con un más (+) y un menos (-) o una rueda que nos ayuda a regular la intensidad.
– Modos de vibración: Además de la intensidad, hay algunos vibradores que tienen diferentes modos, es decir, puedes cambiar el ritmo de la vibración mediante un botón. Es importante saber cuántos modos diferentes tiene y si éstos te gustan. Existen vibradores que permiten grabar tus propios modos (como este).
– Ruido: Es muy frecuente buscar vibradores silenciosos (aunque siempre se puede ambientar con un poco de música de fondo). Además, el sonido no será el mismo el primer día, que cuando ya lleva un largo recorrido de uso.
Y por último (pero no menos importante): ¿Todas las mujeres deben tener un vibrador? ¡En absoluto! En las reuniones de productos eróticos de Placer ConSentido, siempre insistimos en la importancia de que cada persona encuentre su producto (si es que quiere en encontrarlo, claro). Cada persona es única y, por lo tanto, tiene un cuerpo exclusivo. Como siempre, el autoconocimiento es el inicio.
Ya sabes que puedes encontrar vibradores en la tienda erótica online. Trabajamos con prácticamente todas las marcas, así que sólo nos tienes que decir lo que estás buscando, y te lo proporcionaremos al mejor precio. Y si necesitas asesoramiento, ponte en contacto con nosotras y estaremos encantadas de ayudarte.