¿QUÉ SON LOS EJERCICIOS DE KEGEL?
Los ejercicios de Kegel, deben su nombre a Arnold Kegel, el ginecólogo que los ideó. Sirven para fortalecer nuestro periné, lo que nos permitirá sensibilizar nuestra zona genital y mejorar nuestra respuesta orgásmica, además de prevenir y aliviar los síntomas de la incontinencia y ayudar en la lubricación en las mujeres menopáusicas. También es interesante saber que algunas mujeres se excitan al practicarlos.
¿DÓNDE ESTÁ EL PERINÉ?
Es la parte inferior del tronco y forma el suelo de la pelvis. Está atravesado por tres orificios: Uretra, vagina y ano.
Para identificar algunos de sus músculos, se puede practicar deteniendo y reanudando el flujo mientras se orina (hazlo una sola vez, ya que podrías crear alteraciones en el reflejo de micción e infecciones). También se pueden localizar introduciendo un dedo en la vagina e intentar apresarlo. Actualmente, existe un aparato para detectar si se realizan correctamente los ejercicios de Kegel. Se introduce en la vagina dejando fuera el palito largo y estrecho que se puede ver en la imagen. Éste, indicará con su movimiento si se están realizando de manera correcta o incorrecta.
Es importante contraer solo los músculos del periné y mantener relajados, en la medida de lo posible, el abdomen, los muslos, las nalgas y el resto de músculos del cuerpo. También es importante respirar con normalidad.
Los ejercicios deben hacerse de manera progresiva e ir aumentándolos a medida que pasa el tiempo. No es conveniente hacerlos todos de golpe el primer día.
ALGUNAS PAUTAS BÁSICAS:
1. Contraer y relajar rápidamente los músculos de 10 a 15 veces.
2. Tensar los músculos durante 3 segundos y relajarlos durante 6 segundos. Realizar de 10 a 15 repeticiones.
3. Contraer la vagina ascendentemente, desde la apertura vaginal hasta el cuello del útero y, después, en sentido descendente. Hay que hacerlo lentamente y efectuar tres paradas durante el recorrido.
¡No te olvides de relajar! Es tan importante aprender a contraer como saber relajar.
¿CUANDO PRACTICARLOS?
Puedes practicarlos en cualquier momento del día. El hecho de que se puedan realizar sin que nadie lo perciba, permite llevarlos a cabo en cualquier lugar.
Igual que cualquier otro ejercicio llevado al exceso, la práctica demasiado insistente puede provocar irritación o molestias. Lo importante es ejercitar la musculatura del periné de manera constante y no es necesario aumentar las series.
Igual que cualquier otro ejercicio llevado al exceso, la práctica demasiado insistente puede provocar irritación o molestias. Lo importante es ejercitar la musculatura del periné de manera constante y no es necesario aumentar las series.
Lo ideal es aprender a contraer-relajar los distintos músculos del periné (y no centrarnos solo en una zona en concreto) y tenerlo en cuenta en nuestro día a día para evitar enviarle presiones inadecuadas y estropearlo.
Si te interesa conocerlo bien y saber cómo ejercitarlo y cuidar de él, puedes apuntarte a la próxima edición del grupo de crecimiento erótico que imparto en el Institut Gomà de Barcelona (enero a abril de 2015).
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