Quizá te ha pasado alguna vez: Conoces a alguien maravillos@, estás encantad@ con la nueva relación, pensando que: ¡Por fin has conocido a LA persona! Pasáis unas semanas increíbles (incluso meses) y, de repente, cuando parece que la relación se va afianzando, esa persona se convierte en otra que desconocías hasta el momento: Se olvida de casi todos los detalles que tenía antes contigo, empieza a hablarte mal, a descargar contigo sus frustraciones y conflictos internos… Y todo un conjunto de comportamientos que te hacen cuestionarte profundamente qué está pasando. El nivel de cambio puede ser radical como el que describo o menos acentuado y paulatino. Pero el resultado es que pasa de ser “la pareja perfecta” a alguien totalmente desconocido. Porque una cosa es mostrar lo mejor de cada un@ en el momento de la seducción y otra cosa muy distinta es olvidarse de la autenticidad y fingir ser alguien que en realidad no eres.
Si te encuentras en esta situación, es probable que sientas que te estás alejando de tu pareja pero es importante que le expreses lo que estás sintiendo y que tratéis de llegar a una solución en equipo. Como ya sabes, la pareja es un gran espacio de crecimiento personal. Eso sí, si l@s dos quieren hacer introspección y crecer.
Si eres la persona que cambia después de seducir a su pareja, cuestiónate esa necesidad de interpretar un papel para conquistar. Realmente, no se están enamorando de ti. ¿De quién quieres que se enamoren si preparas un personaje? Quizá crees que si te muestras “tal y como eres”, nadie va a querer estar contigo. Pero… ¿Y si empiezas a trabajar tu interior para ser esa persona que muestras durante la seducción? Esa persona que quieres ser. Hay personas que creen que tienen un “gen” que les hace actuar de determinada manera y que no pueden cambiarlo, cuando la realidad es que, por ejemplo, están gestionando mal sus emociones y tienen una gran cantidad de ira, tristeza, etc en su interior de cada experiencia de su vida que se ha quedado enquistada. Lo fácil es dejarse llevar por la ira y los malos hábitos. Así que, ¡fuera excusas! Pocas personas han tenido una vida solo llena de experiencias maravillosas, una familia perfecta y una buena educación emocional. Pero tod@s podemos aprender a regular nuestras emociones, a ordenar nuestro pasado, a soltar todo aquello que nos duele y aprender de ello y vivir desde la persona que queremos ser. Obviamente, esto requiere un esfuerzo pero la recompensa es infinita. ¿O quieres vivir toda tu vida reaccionando desde el dolor de las experiencias que has vivido?
Conecta con el amor hacia ti y hacia tu pareja. ¿Qué quieres empezar a trabajar para vivir feliz y construir una relación sana y satisfactoria?
¡Feliz sexo!